Entrevista al Capitán de Navío Ernesto López Villamizar.

Capitán de Navío Ernesto López Villamizar
Decano de la Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada.
Núcleo de Puerto Cabello.

¿De que universidad fue egresado usted?

Escuela Naval de Venezuela.

Usted que tiene experiencia como submarinista, ¿Cuanto aporta la ingeniería de sistemas en la construcción de un submarino?

Es un porcentaje alto porque hoy todo es tecnología, porque su diseño es computarizado, la programación, los controles también lo son, es difícil hablar de porcentaje. Pero seria aproximadamente un 30%.

¿Por favor hablemos de las experiencias profesionales que hayan marcado su vida?

Ser Comandante de un Submarino es una experiencia inmensa y no me dio miedo ya que uno viene preparado mental y psicológicamente. Al principio como submarinista, yo empecé sin conocimiento pero con las ganas, después en la edad madura ya tenia conocimientos y con las ganas de hacerlo bien. En la edad mayor tomé las precauciones y las responsabilidades. Para llegar a Comandante hay que durar unos 15 años, me siento bastante orgulloso porque me dieron unos de los dos submarinos que existían en Venezuela en aquel tiempo.

La otra experiencia es ser decano, ya que puedo transmitir mis conocimientos y experiencia a toda esta nueva generación. Me alegro de ser la cabeza de este instituto y le doy gracias a Dios.

¿Cómo relaciona usted su especialidad de submarinista con la ingeniería?

Relación 100%. Años atrás me mandaron a hacer un curso en Perú de submarinos donde aprendí mucho acerca de todo lo que son los submarinos.

¿Qué estudios realizó y por qué los eligió?

El primero, el de submarinista, lo escogí porque era una formación integral. Cuando tenía 12 años de graduado me especialicé en recursos humanos, cursé también estudios de Comando y Estado Mayor para ser Comandante, una especialización en Gerencia, después estudié una maestría en administración de empresas, eso me ayudó bastante a mejorar mi parte gerencial, también estoy cursando un doctorado en Ciencias Gerenciales. Nunca hay que dejar de estudiar.